"Tanto esfuerzo, dedicación y entrenamiento para qué, ya no puedo hacerlo más, mis vértebras acabarán rompiéndose, estoy débil, me hago mayor, no sé si estoy llegando, más bien me estoy yendo, eso es lo que debo hacer, retirarme, me estoy matando, cada día intentando superarme como una joven principiante, mis pies parecen muñones, no me responden y la espalda ya ni la siento, de tan retorcida como la tengo, y sin embargo, sigo hechizada como en el cuento..."
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